Pemex cargará a sus proveedores los retrasos en los pagos
La petrolera ideó un esquema que implica un sistema de factoraje por el cual Nacional Financiera (Nafinsa) pagará a las empresas que le den servicios a Pemex, pero este banco institucional cobrará un interés por esa erogación que tendrá que descontarse de las facturas con retrasos de entre 120 y 180 días.
Por este esquema se cobrará un rédito TIIE de +2.25 puntos, lo que implica un interés total de entre cinco y seis por ciento, de acuerdo con datos del Banco de México.
Una fuente de Pemex explicó que anteriormente la tasa de interés era más alta -de hasta 10 por ciento- y con esta negociación se logró bajarla en beneficio de los proveedores.
“A partir de esta nueva política se logró una reducción de la tasa con Nafinsa, con una TIIE de +2.25 que te da una tasa de entre un 4.5 o máximo 6 por ciento, cuando antes el factoraje era de hasta 10 y tienen acceso a efectivo de forma casi inmediata”, explicó la fuente.
El esquema funcionará de la siguiente manera: Pemex subirá al portal Cadenas Productivas las facturas atrasadas, Nafinsa depositará al proveedor el dinero que se debe -con un descuento equivalente al interés- y posteriormente la petrolera nacional pagará a Nafinsa la cantidad de las facturas.
Así, para que a un proveedor le paguen una factura de por ejemplo 2 millones de pesos deberá descontar hasta 120 mil pesos, aproximadamente, de lo adeudado.
La decisión de modificar la política de pagos la aprobó de forma unilateral el Consejo de Administración de Pemex el 24 de septiembre, en sesión extraordinaria, en la que se acordó cambiar los Lineamientos Generales de Tesorería para que los pagos de los contratistas pasen en un máximo de hasta 180 días después de la recepción de la factura.
La recepción de la factura no debe demorar más de 15 días, cuando antes se tardaban hasta 90 días, lo que significa que en este caso se acortó el plazo.
Erik Legorreta, presidente de la Asociación Nacional de la Industria Petrolera (AMIPE), se conformó al opinar que de lo perdido, lo que aparezca.
“No esperábamos que nosotros pagáramos los intereses, pero aun así nos da un respiro importante porque Pemex está poniendo la garantía para que a nosotros nos den ese financiamiento, aunque lateralmente se los estén dando a ellos”, señaló.
Reconoció que la industria petrolera está en una situación crítica de liquidez, pero aguantando las condiciones, porque esperan que vengan las recompensas de la reforma energética en el mediano plazo.
“Lo vemos como una buena señal que va a permitir regresar liquidez al sector que verdaderamente está en este momento, en una realidad muy cruda para las compañías, en donde tienen atrasos de más de 120 a 180 días.
Estamos entrando en una época decembrina y hay que cerrar años fiscales, pagar aguinaldos, pagar también a nuestros proveedores y no hay dinero”, lamentó Legorreta.
Esta solución llega entonces a “salvar” el sector al que además se le pide no detener los trabajos y servicios que se realizan para Pemex.
“Pemex te sigue exigiendo seguir desarrollando las obras ya contratadas pero no nos paga, pero sí hay compromiso de seguir ejecutando los proyectos, sin embargo, cada vez se vuelve más difícil esto y la verdad es que si no salían con un anuncio de esta naturaleza pronto se podía poner aún más complicado”, dijo Legorreta.
Por lo pronto el responsable de la Dirección Corporativa de Procura y Abastecimiento de Pemex, Gustavo Escobar ha sostenido tres reuniones con proveedores y contratistas en Poza Rica, Villahermosa y Ciudad del Carmen, donde les ha aclarado sus dudas e inquietudes, además de ofrecerles esquemas de financiamiento.
A través de un comunicado Pemex explicó que ante el entorno internacional actual derivado de la brusca caída de los precios del petróleo, todas las empresas petroleras del mundo han adoptado medidas similares de austeridad y reducción de gastos.
Este año Pemex recortó su presupuesto en 62 mil millones de pesos, incluyendo una disminución de 10 mil millones de pesos en el costo de la nómina.
El caso Oceanografía
El supuesto fraude entre de la empresa proveedora de Pemex, Oceanografía, a Banamex se originó precisamente por un esquema de factoraje. Oceanografía pidió créditos con base en facturas que, en el caso la prestadora de servicios navieros de Amado Yáñez, no tenían validez, es decir usó un esquema de factoraje.
Sin embargo en este modelo anunciado por Pemex, la factura se subirá al portal de Nafinsa Cadenas Productivas. Así el que registra la factura es Pemex, y no el proveedor directamente con el banco, por lo que hay una corresponsabilidad de la petrolera nacional en este tema.