Hacienda abre otro camino para otorgar apoyo a Pemex
La entrega de 239 mil 93.8 millones de pesos a la Secretaría de Hacienda por remanentes del Banco de México, ayudará a fortalecer las finanzas públicas del gobierno Federal, lo que a su vez permitirá abrir espacios para apoyar financieramente a Pemex, señalaron el subsecretario de Hacienda, Fernando Aportela, y analistas consultados por El Financiero.
“Lo que es importante de los remanentes, y por eso es secuencial el tema, es que estos fortalecen las finanzas públicas, mejoran las metas de balance; ese fortalecimiento y mejoras en las metas de balance abre espacios para apoyar a Petróleos Mexicanos. Lo que vamos a hacer y anunciar en los próximos días son las medidas (de apoyo a Pemex), dado que ya conocemos el nivel de fortalecimiento de las finanzas públicas derivado del remanente de operación del Banco de México”, dijo el subsecretario de Hacienda a El Financiero.
Señaló que 70 por ciento del total, correspondiente a 167 mil millones de pesos, se destinará a disminuir los montos de la deuda.
En específico se utilizarán 103 mil millones de pesos para recomprar deuda existente del gobierno, mientras que 64 mil millones de pesos serán para disminuir el monto de colocación de deuda programada para el resto del año.
“En la medida más amplía, en el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) está la deuda de Pemex. La medida más amplía se reducirá en la parte de menor colocación de deuda federal y operaciones de recompra del gobierno federal”, indicó el subsecretario.
Por su parte, Guillermo Aboumrad, director de Estrategia de Mercado de Finamex Casa de Bolsa, explicó que cuando entren los excedentes del Banxico a las arcas federales, bajará el SHRFSP, “entonces hasta ese punto serán los apoyos a Pemex”. “El gobierno se va a limitar al espacio que le dé el remanente y a buscar ahorros por otro lado para apoyar más a la empresa”, anticipó.
Para la recompra de deuda, el funcionario de Hacienda detalló que se modificará el plan de financiamiento para el segundo trimestre, el cual se dará a conocer en la última semana de abril, para que entre en vigor a partir del 3 de mayo. Agregó que para el tercero y el cuarto trimestre, el plan será compatible con la disminución que se prevé de 64 mil millones de pesos.
“Ahora no vamos a entregar un bono de mayor duración, lo que vamos a hacer es entregar dinero; tal cual prepagar. El monto (para recompra) es hasta 103 mil millones de pesos”, comentó.
El 30 por ciento restante, equivalente a 70 mil millones de pesos se aportará al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios, mientras que con los 1.7 mil millones de pesos restantes se pagarán aportaciones pendientes a organismos internacionales como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco de Desarrollo de América del Norte.
“Ese destino (a organismos internacionales) está previsto porque es una aportación de capital y va del lado de fortalecer la situación financiera del gobierno. Estas aportaciones de capital lo que hacen es mantener nuestra participación accionaria respecto a otros países”, señaló el funcionario.
Añadió que como su nombre lo indica es un Fondo de Estabilización que se utilizaría si los ingresos no llegaran a lo estipulado en la Ley de Ingresos para este año. En caso que se cumplan, los recursos se utilizarían para el ejercicio fiscal siguiente.
Precisó que en la actualidad el fondo cuenta con 55 mil 995 millones de pesos, a los que se les sumaría los 70 mil millones de pesos para totalizar 125 mil 995 millones de pesos en mayo.
RESPIRO A LAS FINANZAS
Para Mario Correa, economista en jefe de Scotiabank los remanentes, que representan cerca de 5.8 por ciento de los ingresos presupuestarios aprobados para 2016, “son un alivio para las finanzas públicas, que estarán en una mejor posición para poder dar respaldo financiero a Pemex”.
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base, sostuvo que las implicaciones son que habrá una mayor presión por parte de las calificadoras para arreglar la situación financiera de Pemex porque se espera que el precio del petróleo siga debajo de 50 dólares por barril y por lo tanto la empresa seguiría necesitando del gobierno.
“Si no se arregla la situación corremos el riesgo de un recorte en la calificación crediticia en diciembre y eso podría provocar una salida de capitales de México”, anotó.